lunes, 7 de enero de 2013

El último viaje del aventurero Enrique Meneses le llevó a Murcia

Enrique Meneses el pasado mes de octubre en su casa de
 Madrid, en su lugar de trabajo, frente a su ordenador / fuenteprimaria
La mañana de lluvia y nieve del pasado 20 de marzo recogí a Enrique Meneses en su domicilio de la Ciudad de los Periodistas, en Madrid. El viaje que ese día le llevó a Murcia fue el último de su vida. Al día siguiente lo trasladé de vuelta, de nuevo en mi coche, directamente desde el Hospital Reina Sofía hasta su casa. Entre medias había dejado atónitos al par de centenares de asistentes a su conferencia del Aula de la CAM y a todo aquel estudiante, profesor, periodista y admirador que se cruzó con él. No pudo hacer lo mismo al día siguiente con los alumnos de la Universidad de Murcia que lo esperaban en la Facultad de Información y Documentación, porque decidí llevarlo al hospital cuando me confesó que sentía ahogamientos y me preguntó si le podría atender algún médico en la Universidad. No entendió mi decisión, le preocupaba haber dejado a los alumnos murcianos una deuda que le ha acompañado hasta el final de sus días.